enero 03, 2008

BIS y ESTO

Y se largó el 2008 nomás. ¿Lo empezaste bien? Ojalá, che, ojalá.
He de decir que es un número que me resulta visualmente bonito, y como le tengo cariño a los números pares casi que intento pasar por alto el hecho de que Semana Santa caiga en marzo y ENCIMA en la mismísima semana de mi cumpleaños... cosa e' mandinga. Pero no, no voy a empezar con mis supersticiones (que son muchas y de varios colores, otro día te cuento), prefiero un poco de optimismo, sí, eso mismo-opti.
Pensaba y pensaba: “¿Qué catso posteo? ¿Cómo arranco?” Y así me distraía: “Si no me gusta, ¿se podrá arrancar una hoja de un blog?” Y después me imaginaba una hoja arrancada, ¡pero de un árbol! Como ya me iba bien al carajo, me dije: “Dejate de huevadas, andá a lo tuyo” (¿por qué cuando me hablo siempre caigo en la forma de la 2ª persona?, voy a inventar una forma de imperativo para estos casos reflexivos).
Fue así como decidí postear algo sobre este 2008 bisiesto... ¿y esto? Ajajám, eso, sí, voy a escribir sobre la etimología de “bisiesto”, al fin y al cabo éstas son pavadas que me gustan.
¿Cómo? ¿Que ya sabés de dónde viene? Ah no, ¿que te importa un pomo? ¿No? ¿Que seguro que lo sacás? Bueh, mirá, no te entiendo lo que me decís, así que yo lo explico igual (en versión breve):
Sobre la grandeza de Julio César y los cambios que ordenó hacerle al calendario, ya hice referencia más de una vez (en 2006 y en 2007, en 2008 no podía faltar), pero siempre hay un bonito bocado más. También a él le debemos este detalle del 29 de febrero... bueno (acá es donde la cosa se complica), digamos que a él le debemos el día extra en febrero, ahora te explico.
Obélix no estaba tan errado cuando decía que los romanos estaban majaretas, tenían sus vueltas, ha de admitirse; entre ellas: contaban los días de una forma muuuy atravesada para nuestra concepción actual (y ésta es la parte que me voy a ahorrar, porque de seguro te irías a dormir o a otro blog).
Para hacerla corta, te lo digo así: ellos no agregaron el 29 de febrero, pero sí empezaron a contar dos veces el día 24 de febrero (cada 4 años, of course). Entonces (para que veas su majaretitud), si querían decir, a secas (o mojadas) “24 de febrero”, en latín eso vendría a ser: “ante diem sextum kalendas martias” (es decir: “día sexto antes del 1º de marzo” = faltan 6 días para completar el ciclo de 30, o sea, 30-6=24, ufff).
Y cada 4 años, cuando agregaban el bendito día extra, para ellos ése era un “24 bis”, por lo cual decían: “ante diem bis sextum kalendas martias” (día sexto bis antes del 1º de marzo). Bis sextum. Bisiesto.
¡Qué locura!, ¿no? Digo, escribir un post sobre (bis y) esto. ¿Quién me manda a mí? En fin, todo sea por amor a los majaretas y al idioma (el de ellos y el nuestro). Que tengas un buen año bisiesto.

7 Comments:

At 4/1/08 08:37, Blogger Fodor Lobson said...

excelente, mencantó.
Nunca te acostarás sin saber algo más.

 
At 4/1/08 13:05, Blogger Begonia Loverraine. said...

¿qué?

 
At 4/1/08 18:52, Blogger Tomás Grounauer said...

¿Y por qué querían duplicar el 24 de Febrero?

 
At 6/1/08 15:30, Blogger EnLaOscuridadDeLaNoche said...

¡Anda! ¡Qué interesante! Pero estoy con cerebro magnético: ¿por qué el 24 de Febrero?
A mi, por razones en las que no voy a entrar, me dan miedo los años bisiestos... y prefiero los años impares, pero lo posaremos lo mejor posible :-)
Besos y ¡Feliz 2008!

 
At 7/1/08 08:59, Blogger Psicodélica star said...

¡Mi cumpleaños es viernes santo! Es muy injusto. Voy a ir a Defensa del Consumidor. Eso no se le hace a las personas.

En fin, feliz año bisyesto...

Carpe diem bis sextum credula postero

 
At 8/1/08 09:45, Anonymous Anónimo said...

Carpe, sos groso.

 
At 9/1/08 18:06, Blogger Carpe diem said...

Fodor Lobson: Malegro :-)

Begonia: Que feliz año, mujer, ¡eso! ;-)

Cerebro: No es que querían duplicar el 24, es que tan complicada era la forma en que contaban los días, que lo único más rápido era esto. El asunto es que los siguientes 6 días para completar los 30 tenían nombres muy específicos, y un montón de cosas se regía por ellos, así que esos otros no los podían cambiar... en fin, si querés te muestro un calendario y te saco la duda a fuerza del embole más aburridor del siglo (o año bisiesto), jé. Saludos.

En la oscuridad de la noche: Ahí le respondo medianamente a Cerebro. Y con respecto a tu “superstición” numeral, es igual a la mía, pero bueno, hay que ser optimistas, bien nos puede sorprender un año par (¡y bisiesto, y con Semana Santa en marzo, y en la semana de mi cumpleaños!) :-D

Psicodélica star: Es que vos sos una santaajajajaja. (Ay, perdón, no pude ni terminar el chiste) :-P Que bonita, ella, escribe en perfecto latín métrico. Besito.

Lucy in the sky: No, juro que no soy Grosso, mi apellido es otro (¡cuak!). Saludos.

Buen año, gente. Ahí nos vemos.

Carpe diem

 

Publicar un comentario

<< Home